A puntito estuve ayer de conseguir la clave para crackear una de las 6 WiFi's del vecindario en San Emilio. Creo que me faltó una cosilla, a ver si hoy lo conseguimos y sentimos que los casi 8 años de estudios permiten detectar una necesidad, buscarle no,bre, documentarse, adquirir el hw necesario y aplicar dichos conocimientos para resolver esa necesidad. Viva, via!
El viernes estuvimos con Fer y Olivia en el Zanzibar (cuyo nombre me recuerda al bar Dublinés a orillas del Liffey). Fuimos allí en principio para escuchar un cuarteto de jazz-flamenco. Luego nos contentamos con tener una mesita donde charlar un compartir un poco de nosotros. Estuvo bien, aunque yo estaba matado por el judo, con algún que otro dolor. Luego, lifteo a casa y a dormir que los chavales esperaban un monitor con fuerza y dinamismo (que si no te comen ellos) para ir al Retiro.
Me desperté tarde. A la hora que supuestamente debería estar allí en la residencia. Fuck! Cuando nos juntamos en el Retiro uno de los chavales ya estaba cabreado..es el mismo de siempre. Parece que nos vamos acomodando. So do they. A la vuelta, decido quedarme en casa de Daddy&Mum ya que la rodilla me duele cada vez más. No llego al campo de los Pinos y paso de forzar la maquina. Al final, en dos días como nuevo, es un mero tirón y un dolor suave-suave en la rodilla.. Por la tarde, intentamos recuperar un poco de feeling con la guitar aunque sin mucho exito.. vamos a tener que trabajar más el tema.
Sábado de conciertos..en La Boca del Lobo volvieron a actuar Red Lee, esta vez con la incorporación de las sevillanas She.
Ellos estuvieron bien. Ellas mejor (por rabiar al mundos!) No se si es la frescura adolescente que se evapora de sus feromonas o simplemente su "grassia y arte" pero lo hicieron francamente bien. Lo mismo piensa la productora sevillana que en Febrero-Marzo pagará por lanzarles un disco. Todo se verá. Lo que está claro es que Red Lee se disuelve de aqui a final de 2006 ya que Dani, cantante y guitarra sucia marcha para la meca de la música: London.
Las sanseras se cruzaron con nosotros a la salida del concert, cuando yo asumía un papel de guardián del backstage. Al final no pudimos juntarnos. Ellas estaban en el ContraClub, su garito. Las rayas del vestido sentaban muy bien. Como han sentado siempre, ultimamente más ceñidas y de tallas menores pero igual de bien. Y me fui para casa, la lechera se cogió sus cántaros de leche y siguió leyendo Rebelión en la granja montado en su autobús nocturno.
El domingo, desayunos y más lecturas hasta dejar la granja casi terminada y comida con la familia. De vuelta a San Emilio, charlitas y cocina para el día siguiente + intentos de crackeos wifi's + pelicula china rarita que no terminé de ver. La cama chillaba más que el DVD...
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