Esto era un vez un chico que va a bajar la basura. Como eran un par de bolsas enormes decide poner el pestillo interior de la puerta y ademas coge las llaves porque abajo puede que no sea capaz capaz de soltar las bolsas sin que se cierre la puerta. Llama al ascensor y la puerta cierra con un portazo sonoro. Bastante sonoro. Muy sonoro. El chico sale del ascensor, sale fuera a la calle donde suelta ambas bolsas de basura cerrándose la puerta del portal ante él. Feliz, saca su llave y se felicita y autocomplace por haber sido tan precavido. A la vez también piensa porque cerrar la puerta con pestillo si habia cogido las llaves. Una pequeña acción innecesaria a evitar la siguiente vez.
Cuando el chico va a abrir la puerta del apartamento la llave gira hasta la mitad. Hacia la derecha. Hacia la izquierda. Sudor. De nuevo esa sensacion, esa sensación que te recuerda que la has cagado. La puerta ha golpeado tan fuerte que el pestillo, ya medio cedido, ha terminado por ceder completamente. Inevitablemente has quedado fuera del juego. Como siempre maldices en los idiomas que conoces sin terminar de aliviar esa sensación de malestar que recorre tu cuerpo.
Al recurrir al vecino de en frente descubre una bella persona dispuesta a ayudar, un brasileño. Da gusto ser ayudado por gente que no conoces. Da esperanza. Finalmente acaba en una cerrajeria cerrada comentandole al vendedor lo que habia ocurrido. El vendedor (mas teorico que practico en la materia) intenta visualizar el problema, la causa y por tanto la solución. Sin embargo no lo consigue. Esta demasiado oscuro por lo que me da un par de telefonos sacados de las paginas amarillas. En ese momento, Martin llama al movil diciendo que esta dentro de casa y que ha tenido que forzar la puerta.
Se me ha pasado comentar que al llamar al landlord para pedir consejo, el landlord me sugiere utilizar mi hombro como arma arrojadiza. En ese momento el permiso esta dado, el dedo esta preparado para pulsar el boton que dispara el torpedo. Pero es mucha responsabilidad y dubitando decido no encarar el problema. Es cuando bajo a la cerrajeria.
Una vez dentro, la ingenieria interior del muchacho hace que se ponga a arreglar el cerrojo y que al final lo consiga, no sin haber estado bloqueado con la colocación de la pieza principal en una cerradura. El muelle.
Hay que joderseee.. :-))
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